Una de las características principales de las apps móviles es que las funcionalidades más sencillas cobran un alto valor al poder ser ejecutadas en cualquier momento y lugar.

Otra es que cada día vamos incorporando en nuestros móviles nuevas apps de uso personal. Es en este punto cuando muchas necesidades que aprendemos a solventar desde nuestros móviles no están resueltas todavía para trabajar.

La llamada Consumerización de IT es precisamente esto: cuando las nuevas tecnologías de información surgen del lado del consumidor. El consumidor se ha vuelto el impulsor primario de la innovación, y por ello, en OFFSHORETECH consideramos esencial escuchar a los usuarios antes de promover cualquier nueva iniciativa en movilidad para la empresa.

Cuando WhatsApp apareció en 2009, se presentó como un mero sustituto de los SMS, como un ahorro de costes en mensajes. Por ello, su popularidad en EEUU donde ya existían las tarifas planas de SMS fue escasa. Ahora con los años y la incorporación de nuevas funcionalidades que la han convertido en una enriquecida solución de mensajería instantánea, es quizá la primera aplicación indispensable que instalamos en nuestro nuevo móvil.

Pero WhatsApp ha ido más allá de compartir fotos, videos, notas de voz en grupos, hacer llamadas o videollamadas… para muchos WhatsApp significa un nuevo canal de comunicación adaptado al consumidor moderno, sin que éste tenga que ser un millenial.

Un ejemplo es que, cada día, más empresas ofrecen servicio de atención al cliente por WhatsApp. Es indiferente si no te responden al teléfono o si el servicio te contacta en 5 o 10 minutos, mientras la comunicación sea eficaz y percibas que se atiende a tu problema. Otro ejemplo es el de pequeños autónomos que agendan servicios, piden fotos a sus clientes previo a una reparación, o incluso proporcionan atención médica familiar a través de este canal.

Pero…¿qué podemos hacer con WhatsApp y qué no debemos hacer a través de este canal?

Tanto para un pequeño empresario como para una gran empresa, cumplir con las directivas europeas de protección de datos es una necesidad primordial, de manera que cualquier fuga de información accidental puede repercutir en fuertes sanciones. Esto sin mencionar regulaciones adicionales para sectores específicos como el de las finanzas o el sanitario. Es por ello que debemos conocer los problemas de WhatsApp en materia de seguridad, antes de seguir utilizándolo en el trabajo o cuanto menos antes de compartir cualquier información que pueda ser considerada sensible.

8 características de WhatsApp que pueden comprometer la información que se comparte

1) WhatsApp no dispone de una contraseña de acceso a la aplicación. Esto es muy importante sobre todo porque por mucho que protejamos las aplicaciones corporativas con técnicas de autenticación en múltiple factor y contraseñas robustas, WhatsApp no las soporta. Además, técnicamente hablando, no podemos estar seguros de quién está al otro lado.

2) Aunque se disponga de cifrado extremo a extremo, los chats, las imágenes, las notas de voz, los vídeos y los documentos se almacenan sin cifrar en carpetas del dispositivo fácilmente accesibles. A menudo también estos archivos suben a la nube como backup de información personal, en el momento que se reciben.

3) Desde la propia aplicación se pueden compartir archivos con aplicaciones de terceros tales como almacenamiento en la nube o redes sociales.

4) Los chats son fácilmente enviables por correo electrónico desde la misma aplicación, si un usuario tiene acceso a tu móvil.

5) Si se tiene acceso a la aplicación, escaneando un código QR se puede abrir una sesión paralela en WhatsApp Web para espiar tus mensajes a tiempo real. Esto WhatsApp almenos lo avisa mediante una notificación en sus versiones más recientes.

6) La empresa no tiene copia de los mensajes como así sucede por ejemplo con el correo electrónico.

7) La empresa no puede borrar las conversaciones y archivos en caso de pérdida o robo del dispositivo.

8) Además de las características anteriormente mencionadas, se han detectado en los últimos años múltiples vulnerabilidades mediante ataques a las API de WhatsApp así como técnicas de suplantación de identidad mediante phishing. La más reciente suplantaba la identidad de un amigo para activar en un tercer dispositivo tu cuenta de WhatsApp con sólo pedirte que le dieras un código que supuestamente te habían enviado por error. Es por ello que a nivel empresarial se debe tener especial cuidado en utilizar WhatsApp para trabajar, sobre todo si se va a compartir a través de él información sensible.

Mensajería avanzada segura para Empresas

En OFFSHORETECH disponemos de soluciones de mensajería avanzadas que solventan estas problemáticas, proporcionando a la empresa un entorno gestionado tanto para la colaboración entre empleados como para las comunicaciones entre la empresa y los clientes.

Dichas soluciones abarcan desde soluciones con certificación de grado militar para conversaciones secretas hasta soluciones de mensajería instantánea gestionada y segura, hasta soluciones de mensajería instantánea empresarial combinadas con tecnologías de gestión de movilidad empresarial EMM/UEM, así como una versión de WhatsApp modificada para poder disponer de copia de los mensajes y borrado remoto de la misma en caso de pérdida y robo. Nuestras soluciones cuentan con certificación de la OTAN cumpliendo con estándares FIPS 140-2, y las directivas europeas RGPD, HIPAA, SOX y MiFID II.